El Pleno aprobó ayer por unanimidad una Moción de Urgencia de los Grupos Municipales de la oposición, PSOE e IU, con enmiendas del PP en el mismo sentido, para modificar el Plan General de Ordenación y paralizar provisionalmente la aplicación del nuevo valor catastral.
El Pleno acordó crear una Comisión Especial de Estudio para modificar el Plan General de 2006 en amplias extensiones del Campo y de algunas pedanías afectadas por el cambio de naturaleza de suelo rústico a urbanizable.
Este cambio implica que las superficies afectadas tengan ahora un nuevo valor catastral, de tipo urbano, lo que significa pagar bastante más por el Impuesto de Bienes Inmuebles.
El cambio de tipo de suelo que impuso el Plan General en 2006 ha generado protestas entre los casi 5.000 afectados, muchos de los cuales quieren seguir dedicando sus tierras a la agricultura y conservando los derechos de agua de riego que tienen para ello.
El PSOE considera primordial y necesario defender y proteger este hecho. Por ello, además de modificar el Plan General y “paralizar” los nuevos valores catastrales, la Moción aprobada contempla estudiar medidas fiscales, económicas y sociales para favorecer el desarrollo agrario y rural de Molina.
El PSOE agradece la presencia y el apoyo de los más de 200 vecinos de las pedanías del Campo de Molina (Campotéjar Baja y Alta, Fenazar, Los Valientes, El Romeral, Comala, La Hurona, La Espada, La Albarda) con los que los concejales del PSOE Lola Ferre y José Oliva han estado reuniéndose desde hace varias semanas para buscar una solución antes de que finalice el plazo dado por la Oficina Regional del Catastro.
Para el PSOE, el malestar mostrado por miles de personas con el Plan General era una cuestión de tiempo, ya que fue aprobado de espaldas a los intereses generales y con poca transparencia.