Los vecinos de los barrios San Miguel y El Carmen de Molina salimos a la calle, para protestar contra la instalación de una nueva antena de telefonía en C/ Granados, 68 y los efectos insalubres de su radiación electro-magnética.
Por ello, nos hemos organizado en torno a la Plataforma GRANADOS 68, para coordinar la movilización de los vecinos en defensa de nuestra salud, con acciones como la recogida de firmas, la creación de un mapa de enfermedades alrededor de la antena, la pegada de carteles en la fachada de sus casas o los paseos con paragüas en mano, que realizarán por sus calles los martes y jueves, para simbolizar la desprotección que sufrimos ante la radiación de la citada antena.
Consideramos que la radiación de las antenas de telefonía no solo está afectando a la salud de los vecinos en un radio de 400 metros, con numerosos casos de cáncer prematuros ya contrastados y otras enfermedades, sino que también afecta a los niños escolarizados en la Escuela Infantil La Inmaculada, así como a los CEIP Tierno Galván y San Miguel, zonas consideradas sensibles por la normativa del Gobierno estatal, que entrará en vigor a partir del próximo 1 de octubre y limita su instalación.
También nos preocupa que el Ayuntamiento de Molina no haya paralizado cautelarmente la actividad de la antena, como le solicitó AMUCCEM (Asociación Murciana Contra la Contaminación Electro-Magnética) el pasado mes de julio, en virtud del Art. 43 de la C.E. o el Principio de Precaución recogido en el art. 3 d) de la Ley General de Salud Pública 33/2011, por el cual debe aplicarse ante “la existencia de indicios fundados de una posible afectación grave de la salud de la población, aun cuando hubiera incertidumbre científica sobre el carácter del riesgo, determinará la cesación, prohibición o limitación de la actividad sobre la que concurran.”